La Dirección General de Emergencias e Interior ha organizado hoy en el Centre Bit de Inca la Jornada Técnica de Seguridad en las Playas de Mallorca, una reunión que este año está marcada por la COVID-19 y que tiene por objetivo la adaptación de los planes de salvamento y la armonización de las medidas de prevención a los usuarios de las playas.
Ordenación de la ocupación de las playas
Para respetar las medidas de distanciamiento obligatorias en las playas (que es de un metro y medio entre personas o grupos de personas) y controlar la ocupación de las playas, los ayuntamientos establecerán un sistema que permita controlar el cumplimiento de la normativa en este sentido, ya sea mediante la contratación de informadores, la utilización de recursos municipales o controles policiales.
Así mismo, se instalarán carteles informativos de los nuevos usos en todas las playas para explicar las medidas de prevención ante la COVID-19.
Los municipios que tengan playas poco accesibles (accesos con poca anchura, por ejemplo) crearán circuitos seguros, es decir, diferentes vías de entrada y de salida para que no se acumule la gente. Y es que la playa debe ser un lugar seguro.
Nuevos procedimientos en caso de emergencias en las playas
Esta mañana también se ha tratado con los coordinadores municipales de playas de los nuevos procedimientos de seguridad en caso de emergencias para prevenir contagios entre víctima y socorrista y socorrista y víctima. Los rescates se harán considerando la seguridad del equipo humano de rescate, la seguridad de otras personas que se encuentren en la zona, las mejores condiciones posibles para la persona rescatada y la utilización del menor tiempo posible en la intervención, sobre todo si se trata de casos de ahogamiento.
Las medidas concretas que se aplicarán, entre otras, son: